Los trabajadores del Centro de Salud Joaquín Elizalde llevan días sufriendo unas situaciones de estrés en sus puestos de trabajo debido a la falta de protocolos en la vuelta a la “nueva normalidad” de la Atención Primaria, situaciones generadas por la falta de criterios, protocolos y personal adecuado que controle y regula el aforo que cumpla la normativa actual
La Atención Primaria está poco a poco recobrando la actividad asistencial en los Centros de Salud, debido a la nueva situación que el SARS COV2 ha generado en nuestra sociedad esta vuelta a la actividad presencial debe ir de la mano de unas normas y protocolos por parte de la Administración que garanticen el buen funcionamiento de los Centros y la seguridad de sus trabajadores y pacientes.
Los trabajadores de Atención Primaria del Servicio Riojano de Salud se han adaptado y han dado el 100% en los tiempos de pandemia e igualmente están respondiendo en este periodo de transición que no está siendo igual en todos los Centros de Salud. Hace días el personal del Centro de Salud Joaquín Elizalde, mostraba sus quejas ante la falta de organización que se estaba produciendo diariamente sobre todo en la entrada, sin personal que la controle y sin protocolos de actuación ante el aumento de demanda asistencial de la población.
La respuesta que obtuvieron fue que el personal Administrativo debía ser el encargado de controlar el acceso al centro y el cumplimiento de las normas de higiene y uso de mascarillas por parte de los usuarios, labor imposible de realizar de una manera adecuada por este personal que está totalmente sobrepasado con la carga asistencial que presenta en su puesto habitual.
Esta situación ha ido en aumento cada día y concretamente hoy ha precisado la presencia de la Policía Nacional debido a la tensión y la imposibilidad del Centro de controlar el aforo y el cumplimiento de las normas actuales de higiene y uso de mascarilla, este caos organizativo ha llevado a que un paciente con sintomatología de COVID19 haya accedido al Centro por el circuito inadecuado sin el cumplimiento de los protocolos.
De ningún modo se puede sobrecargar al personal Administrativo que realiza la atención telefónica y presencial de ventanilla exigiéndoles además que se ocupen del control de aforos. Requiriéndose para ello la contratación de personal de seguridad específico.
El Sindicato STAR exige a la Administración que se aborde el problema actual con las medidas y personal pertinentes que mejore la actual situación del acceso a los Centros de Atención Primaria de La Rioja, y con mayor urgencia la actual situación del Centro de Salud Joaquín Elizalde y en consecuencia las condiciones de usuarios y trabajadores del Servicio Riojano de Salud.